En Internet y en las redes sociales existen muchas clases distintas de contenido. Algunos contenidos se adaptan mejor que otros a las necesidades de los usuarios, por lo que antes de comenzar a producirlos, es importante que tengas claro tu objetivo.
Pero antes de pasar a analizar qué contenidos te conviene más compartir en Twitter, Instagram o Facebook ¿qué te parece si hacemos un pequeño repaso del tipo de contenidos que NO funcionan en ningún lado?
Antes de que inicies con cualquier estrategia de contenidos, considera que los siguientes no van a atraer a nadie, y si lo hacen, será para “pisar y correr”:
Contenidos digitales que nunca funcionan:
-Contenidos engañosos
El típico artículo que ves en Facebook con el encabezado “mamá millonaria de (inserte aquí la zona del usuario) cuenta cómo gana mil dólares por hora”, para los usuarios significa “otro multinivel fraudulento”.
-Contenidos que no son lo que prometen
Si titulas un contenido como “haz este sencillo truco una vez al día y olvídate de la grasa abdominal en dos semanas”, los usuarios saben que se trata de una carta de ventas con pastillas supuestamente milagrosas.
-Contenidos iguales a los demás
Aceptémoslo, tu contenido puede ser aceptable, pero si no es diferente, no tiene muchas posibilidades de éxito.
-Contenido impersonal
La apuesta de llegar a la mayor cantidad de personas posibles es francamente ineficiente cuando la comparamos con una estrategia quirúrgica que alcance un público muy bien segmentado y con intereses perfectamente definidos. En lugar de aventar un montón de piedras a la multitud, mejor dispara algunas flechas bien encaminadas.
Una vez que tienes perfectamente claro en qué estrategias no tiene sentido perder tu tiempo y tu dinero, revisemos aquellas que sí pueden ayudarte a sacarle todo el jugo posible a las redes.
Ten claros tus objetivos
Por lo general, los contenidos digitales están insertos en una estrategia más general de Inbound marketing que puede resumirse en: atraer prospectos y llevarlos de la mano por el camino hacia la compra y el engagement.
Pero, considerando que no todos los prospectos son iguales ni se encuentran en la misma fase del proceso de compra, es lógico que cada uno de tus contenidos cumpla una función diferente dependiendo del sector del público objetivo al que se dirija.
Sí, hay que segmentar dentro de la segmentación.
Enfócate a generar confianza y empatía
Todos tus contenidos, independientemente del público al que estén orientados y la etapa del embudo de ventas que representen, deben cumplir la función de generar empatía en el usuario y construir una relación de confianza.
La confianza la obtienes ofreciendo contenido de calidad que no esté plagado de publicidad invasiva y molesta. La empatía la generas hablando en el idioma de tu usuario. Antes de comenzar a establecer el diálogo, pregúntate cuáles son los problemas y necesidades de tu target, y genera contenido realmente útil que le ayude a solucionarlos sin que forzosamente tenga que comprar algo.
Cuando llegue el momento en que el usuario se decida a comprar, que llegará, serás su primera alternativa porque serás una marca en la que ya confía.
Tipos de contenidos que debes considerar en tu estrategia de Inbound:
Contenidos informativos
Son todos aquellos que le ayudan al usuario a conocer tu marca. Incluyen los productos o servicios que manejas, tus ubicaciones, precios, ventajas, beneficios, etc. Al ser información que a veces puede ser muy técnica, hay que presentarla de forma innovadora y atractiva para no perder el interés del público.
Hay mucha diferencia entre un artículo que sea un catálogo de especificaciones de producto, y uno que se titule “Nuestros 10 mejores …etc.”
Contenidos de valor
El contenido de valor es aquel que vincula a nuestra marca con cualquier experiencia grata para el usuario. Puede ser información útil para afrontar las necesidades de su estilo de vida, videos graciosos, memes, narraciones de eventos en los que participaste como patrocinador, etc.
Las posibilidades son infinitas, pero la creatividad y la personalización del contenido siempre deben de ser tus banderas.
Contenidos curados
Por último, siempre tienes la posibilidad de aprovechar el contenido de otras empresas o sitios para promover ambas marcas, siempre y cuando no entren en competencia directa.
Recuerda que el plagio es algo muy diferente. Los contenidos curados implican una alianza estratégica en la cual el mismo contenido puede aprovecharse más de una vez.
Con estas indicaciones en mente, ya puedes comenzar a prospectar contenido para redes sociales que realmente tenga posibilidades de distinguirse entre el resto, ayudarte a enriquecer tu comunidad y traducir el esfuerzo en ventas.