¿Cuántos puestos del equipo de marketing quedarán en manos de inteligencias artificiales IA?
En los últimos seis años hemos visto cómo el desarrollo de Inteligencia Artificial IA, avanza cada vez más rápido. Y cada vez es capaz de hacer cosas más impresionantes.
Lo que comenzó con una máquina capaz de ganarle al campeón mundial de ajedrez ahora nos sorprende con IA´s capaces de escribir noticias con lenguaje natural de manera automática. Y parece que su desarrollo continuará a pasos cada vez más vertiginosos.
Y aunque le falta mucho desarrollo para ser un reemplazo viable de redactores y editores, la creación de este algoritmo suena a la primera trompeta del Apocalipsis creativo que vendrá en los próximos años.
Así como una gran cantidad de obreros vieron cómo sus trabajos eran tomados por máquinas y robots cada vez más sofisticados, pareciera que en los próximos años muchos puestos del equipo de marketing podrían quedar en manos de una inteligencia artificial.
¿El levantamiento de las máquinas?
De hecho, este proceso ya ha comenzado desde hace varios años. Por ejemplo, los encuestadores son una raza en peligro de extinción gracias a que en la actualidad los datos de preferencias de consumo son obtenidos mediante formularios en línea o incluso del análisis del comportamiento del usuario.
Del mismo modo, los analistas de marketing han visto cómo su trabajo se vuelve cada vez más fácil gracias a los reportes de desempeño cada vez más completos de plataformas como Google Ads. Tal vez no falte mucho antes de que sean reemplazados por completo.
Así que surge la pregunta:
¿Realmente cuántos marketeros están en peligro de perder sus trabajos?
La respuesta según un estudio de ONS (UK’s Office for National Statistics) es preocupante. De acuerdo con una estimación reciente, alrededor de 1.5 millones de empleos tan solo en Reino Unido están en riesgo de volverse tareas automatizadas.
Esto afecta a varias industrias y entre ellas está el marketing. Para ser exactos, alrededor del 43% de los puestos de trabajo pueden ser reemplazados por una inteligencia artificial.
Y ni siquiera los puestos altos están a salvo. Se proyecta que el 28% de los marketeros senior también corran con esta suerte.
¿Es un buen momento para entrar en pánico?
Este estudio puede ser visto de varias maneras. Algunas más alarmistas que otras. Para empezar hay que dejar en claro que este reporte fue realizado por una dependencia gubernamental del Reino Unido. Un país con una larga tradición tecnópata en el que analizaron los datos de los trabajos de 20 millones de personas.
Sin embargo, de acuerdo con su censo poblacional de 2011, la población en edad productiva es de 36.3 millones de personas, y según el reporte del mercado laboral de Reino Unido de 2018, 32.4 millones de personas se encuentran trabajando.
Es decir, que el polémico estudio fue realizado con ⅔ partes de la información total disponible. Y cualquiera que haya estudiado estadística puede darse cuenta de que falta mucha información como para tomar por verdad absoluta los resultados.
La mayoría de los trabajos que pueden terminar siendo procesos automatizados corresponden a personas jóvenes, mujeres y trabajadores de medias jornadas.
Y aunque sea tentador pensar en esto como un “Levantamiento de las máquinas” la realidad es menos perversa. Pues sólo se trata de automatizar las tareas más rutinarias y repetitivas, creando un algoritmo o una máquina que se encargue de ellas de manera más rápida y eficiente.
Tampoco es como que los puestos de trabajo en el marketing sean los más afectados. Los tres trabajos más susceptibles a ser automatizados son meseros y meseras, personal de almacén y vendedores de bajo perfil. Es decir, exactamente aquellos que requieren poca habilidad y son rutinarios.
¿Entonces qué significa este estudio?
De modo que este no es un buen momento para entrar en pánico, sino todo lo contrario. Este estudio es un gran llamado a la acción para que todos los marketeros se actualicen y no se rezaguen en la adopción de nuevas tecnologías para mantenerse competitivos.
Pero lo más importante es nunca sucumbir al “Síndrome del Juguete Nuevo” y con ello priorizar la adopción de nuevas tecnologías por encima del desarrollo creativo, innovación y creación de valores, que son la esencia y la razón de ser del marketing.
Y tú ¿qué opinas de este tema?